La odontología en la edad media era practicada en la Europa católica por curanderos y charlatanes que acudían a aprender a los monasterios. Los monjes que se dedicaban a la medicina lo hacían de manera teórica y casi siempre traduciendo los textos de autores árabes que son los que realmente produjeron avances en la materia. La religión prohíbe demasiadas cosas y la superstición otras muchas y ¡claro!, así no se avanza.
En el siglo XII se fundan la primeras universidades como centros docentes pero que son también fundamentalmente teóricas y no contemplan todavía la parte práctica de la profesión.
Hay una gran diferencia con los estudios de medicina que se hacen en el mundo islámico donde por ejemplo, los hospitales funcionaban como verdaderos centros docentes que contaban con biblioteca y salas de estudio para los estudiantes, y en el mundo cristiano en el que los hospitales tenían un fin benéfico para atender a los necesitados.
En el mundo islámico se da gran importancia a la higiene oral porque ya es recogida en el corán como » agradable a Dios» y se recomienda cepillarse los dientes cinco veces al día coincidiendo con los rezos. En el mundo cristiano lo de la higiene va a tener que esperar un poco más, sobre todo su generalización, digamos que …casi hasta el siglo XX.
Los grandes nombres de la odontología en la edad media
Abulcasis
Abu al-Qasim Jalaf ibn al-Abbas Al-Zahrawi (936 – 1013), más conocido como Abulcasis nació en Al Andalus, en Córdoba.
Es considerado como uno de los padres de la cirugía moderna. En sus textos se combinan las enseñanzas clásicas greco-latinas con los conocimientos de la ciencia del cercano oriente y fueron la base de los procedimientos quirúrgicos europeos hasta el renacimiento. El fue uno de los mas renombrados médicos de la era musulmana en España, llegando inclusive a ser médico del Rey Al-Hakan II de España.
Abulcasis fue autor del gran tratado Al-Tasrif (El Método), una enciclopedia de medicina y cirugía, la primera en dar una lista de varios cientos de instrumentos quirúrgicos, cuyo uso se describe con todo lujo de detalles. Esta parte de de «El Método» traducida al latín como De chirurgia, le proporciono una fama enorme e hizo que se le reconociera como el cirujano oral más importante de su tiempo.
Abulcasis fue el primero en vincular el sarro con los problemas en las encías y describir la forma correcta de eliminarlo utilizando herramientas inventadas por él mismo.
Aconsejaba extremar la prudencia cuando en el caso de extracciones, «ya que el diente es de un órgano muy noble, cuya posesión no puede ser en ningún caso reemplazada de forma perfecta», pero contribuyo considerablemente a la metodología de la extracción y advierte que deben tomarse muchas precauciones para determinar cuál es el diente enfermo. Muy a menudo el paciente, engañado por el dolor, pide que se le quite un diente que resulta estar sano, sobre todo cuando es un barbero y no un cirujano quien lleva a cabo la operación. Ponía mucha atención en predicar la ética médica frente a la charlatanería.
Recomendaba también ligar los dientes flojos a las piezas vecinas para estabilizarlos y sustituirlos por otros por ejemplo de hueso de animales en caso de perderlos. Nos dejó también un método para tratar los quistes y muchas más cosas, no solamente en el campo de la odontología. Desde luego 77 años muy bien aprovechados.
Avicena
(Abu’Ali al-Husayn ibn’abd Allah ibn Sina; Bujara, actual Irán, 980-Hamadan, id., 1037) Médico y filósofo persa considerado por muchos como el médico más importante de la historia de la medicina antigua. Sus trabajos abarcaron todos los campos del saber científico y artístico de su tiempo, e influyeron en el pensamiento escolástico de la Europa medieval, especialmente en los franciscanos.
Destacó Avicena la importancia de cepillarse los dientes y describe la eliminación de la pigmentación de los dientes con sal y polvos de cuernos de alce.
Para rellenar las cavidades en los dientes utiliza muchos materiales tales como el ciprés o la goma arábiga, nuez moscada, azufre, alcanfor…Para el tratamiento de los problemas de los nervios lo que hace es verter un destilado de arsénico en el interior del diente.
El Al-Qanun fi at-tibb (canon de medicina), el libro de medicina más conocido de su tiempo, es una compilación sistematizada de los conocimientos sobre fisiología adquiridos por médicos de Grecia y Roma, a los que se añadieron los aportados por antiguos eruditos árabes y, en menor medida, sus propias innovaciones.
Estos dos son los nombres de los más importantes médicos de la odolontología en la edad media del islam, pero hay otros como Abu Bakr al – Razi o Ibn al- Jazzar que realizaron también importantes aportaciones.
Guy de Chauliac
Guy de Chauliac (1300-1368) médico y círujano, escribío Inventorium Chirurgicalis Medicinae, en le cual analizaba la anatomía y erupción de los dientes. Recomienda la higiene dental con normas muy precisas. También citaba enfermedades dentales tales como dolor, la corrosión y aflojamiento. Fue muy breve en su análisis sobre prótesis dental, solo mencionaba materiales utilizados para rellenar cavidades,pero no la explicación de como aplicarlas. De su tratado sabemos que se usaban fármacos en los pacientes para evitar dolor durante las operaciones.
Sus aportaciones quedaron vigentes durante algún tiempo, sus sucesores solo fueron añadiendo pequeños aportes.
Realmente la práctica de la odontología en la edad media, y la de la medicina en general avanzó gracias a las aportaciones de los médicos y estudiosos del mundo islámico.
Creo que no nos hubiese gustado a ninguno de nosotros vivir en esa época y tener un dolor de muelas, bueno, y no se si besar o hablar con muchas de sus gentes que «no se lavaron los dientes ni un solo día de su vida«. Además la alimentación había ido cambiando a lo largo de los siglos y cada vez favorecía más la aparición de caries.